aBOGADO

Perdón mil veces por ser abogado

Si, perdón. Lo siento, decidí serlo cuando vi a James Stewart defender al teniente Manion en “Anatomía de un asesinato”. No fui tan torpe como para creer que me pudiera pasar a mi o que podría lograr tan excelso papel en la abogacía. Simplemente me sedujo pensar que podría ayudar a inocentes, víctimas, indefensos, pobres,…